Los miembros del Parlamento de la India han protestado contra las conversiones forzadas de los cristianos al hinduismo. Diputados de la oposición acusaron al primer ministro, Narendra Modi, de no detener las conversiones.
Cristianos son forzados a convertirse al hinduismo en ceremonias públicas en India
Los grupos que organizaron las ceremonias bautismales, insisten en que las conversiones han sido voluntarias y argumentan que los conversos están simplemente regresando a la fe de sus antepasados. Las ceremonias de conversión se llaman "vapasi ghar", que significa "volver a casa".
Los comentarios del jefe del grupo hindú de derecha, el Rashtriya Swayamsevak Sangh, encendieron más la polémica, al afirmar que la India era una "nación hindú", lo que provocaron una tormenta de críticas.
Alrededor de una quinta parte de la India, 1,2 millones de personas son miembros de una fe distinta a la hindú.
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