Maestro gana juicio a escuela que lo suspendió por rechazar políticas LGBT en los estudiantes. La institución tendrá que abonar una indemnización y reponer al docente a su puesto de trabajo.
Un maestro cristiano que se opuso a las agendas progresistas durante una reunión pública y había sido el responsable de educación en la región donde trabaja, logró una importante victoria en defensa de la libertad de expresión y religión.
La Junta Escolar del Condado de Loudoun, Virginia, acordó una orden judicial permanente y pagó $ 20,000 para resolver los reclamos presentados por el profesor Byron Tanner Cross, quien fue castigado por expresar sus creencias cristiana en una reunión pública.
La Alliance Defending Freedom, organización que defiende al profesor, dijo que la orden judicial prohíbe permanentemente a la Junta Escolar del Condado de Loudoun tomar represalias contra Cross por expresar "sus puntos de vista constitucionalmente protegidos sobre la política transgénero del consejo".
El docente se pronunció en contra de las pautas impuestas por la dirección, que prácticamente obligaron a los profesionales a manifestarse contra la ideología de género.
Se opuso públicamente en una reunión de la junta escolar pública a la Política 8040 propuesta en ese momento, que obliga a los maestros a actuar contra sus creencias, al exigirles que llamen a los estudiantes "transgénero y en expansión de género" por los pronombres elegidos en lugar de aquellos consistentes con su sexo biológico.
La junta también acordó limpiar su historial, eliminando cualquier referencia a la suspensión que se le impuso y pagar $ 20,000 para cubrir los gastos legales.
Sin embargo, el caso general continúa, ya que la profesora de historia Monica Gill y la profesora de inglés Kim Wright se han agregado como demandantes junto con Cross, y sus reclamos contra la junta permanecen.
"No se debe obligar a los maestros a promover ideologías que son dañinas para sus estudiantes y que ellos creen que son falsas, y ciertamente no se los debe silenciar para que no comenten en las reuniones públicas", dijo el abogado Tyson Langhofer.
“No se puede obligar a los funcionarios públicos a contradecir sus creencias fundamentales solo para mantener un trabajo. La libertad, de expresión y ejercicio religiosos, incluye la libertad de no pronunciar mensajes en contra de nuestras creencias fundamentales. Es por eso que nuestra demanda le pide a la Corte que proteja los derechos constitucionales de nuestros clientes deteniendo inmediatamente la aplicación de esta política dañina del distrito escolar”, agregó.
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