Ex bruja dice que Halloween no es inofensivo: "Está lleno de rituales demoníacos"

Ex bruja Jenny Weaver

Una ex bruja dice que la celebración de Halloween no tiene nada de inocente, por el contrario, es una fiesta pagana que está relacionada con rituales demoníacos. "La policía y los paramédicos dicen que es el día en que se registran más secuestros y asesinatos", afirmó.

Jenny Weaver, una ex bruja que estuvo involucrada en el ocultismo durante nueve años hasta que Jesús la rescató, advierte que Halloween no es inofensivo y está relacionado con rituales demoníacos.

"Lo que los padres piensan que es algo de un día, pero no es algo de un día. Es una puerta abierta que les permite a los niños, adolescentes e incluso adultos decir: 'Si permitimos este día, entonces estamos permitiendo los horóscopos, películas de terror, brujería y cristales curativos en lugar de invocar el nombre de Jesús'", dijo Weaver.

Vestirse con disfraces, repartir dulces y poner linternas en calabaza, no es una tradición inocente en los Estados Unidos. 

Halloween tiene sus raíces en un antiguo festival pagano del norte de Europa, originalmente llamado "Samhain". El 31 de octubre marcaba el final del verano y el comienzo del otoño y se creía que en este día se abría el mundo de los muertos y los espíritus visitaban la tierra.

“Todo está impregnado de rituales demoníacos”, advirtió Jenny a Charisma News. En esa época, las personas fantaseaba con disfrazarse y protegerse de los espíritus. Y se usaban calabazas para ahuyentarlos.

Durante el festival, se ofrecían alimentos y sacrificios de animales a los espíritus malignos, que creían que venían del mundo de los muertos. Hoy en día, estos sacrificios están representados por los dulces de Halloween. 

"La policía y los servicios de emergencias médicas pueden decir que [Halloween] es el día en que tienen más secuestros y asesinatos de niños. Por alguna razón, en este día, los agentes de la Policía saben que algo está pasando", dijo Jenny.

La ex bruja aconsejó a los padres que no se preocupen por ser "amables" y que deben sentirse bien por no permitir que sus hijos participen en Halloween.

Participación en brujería

Durante su juventud, Jenny se involucró en la brujería, buscando escapar del trauma familiar.

“Cuando era joven, me metí en cosas muy profundas y oscuras. Estaba en una familia abusiva, por lo que el espíritu de rechazo se apoderó de mi vida y estaba buscando aceptación", dijo Weaver.

Terminó involucrándose en malas amistades, lo que la influenció para convertirse en bruja. “Me invitaron a ver una película de terror que trataba sobre cuatro brujas Wicca en la escuela secundaria y tenían todo este poder. Vi la película y decidí que quería hacer eso".

Jenny se mudó con otra bruja. Juntas hacían hechizos, usaban drogas, organizan fiestas e invocaban espíritus para que posean sus cuerpos.

Después de nueve años de vivir como esclava de la oscuridad, Jenny encontró a Jesús y fue liberada a la luz. “Dios me dio un propósito y me liberó en un momento”, testificó.
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