La hija de un pastor evangélico participó en el Carnaval de Río de Janeiro, sin autorización de su padre. Ella dijo que lo hizo en nombre del "arte" y que no sintió vergüenza.
Simone Cerqueira, quien desfiló con casi nada de ropa, integró la escuela de samba Beija-Flor, en celebración de los 70 años de la asociación en el Carnaval de Río.
Usando chancletas y sólo cubriendo la parte de la cintura, con el pecho completamente expuestos, la joven se convirtió en noticia en los medios, en particular, por ser la hija de un pastor evangélico.
Según la información del portal de UOL, la mujer, que asegura es cristiana, cree firmemente que su desfile en el carnaval puede justificarse, porque es un trabajo, y en este caso, es comprensible debido al "contexto".
"No estoy avergonzada, soy actriz y esta fantasía, o mejor dicho, la falta de ella, tiene un contexto. Si no lo hubiera hecho, no estaría de acuerdo", dijo, quien poco después recordó a su padre, quien aunque ya se había enterado de su desfile, no sabía que sería con poca ropa.
"Mi padre tiene 64 años y es pastor evangélico. Le dije que iba a desfilar con poca ropa puesta, pero no como aparecí", dijo la joven, y añadió: "Se va a enterar en la tele, se va a enfadar y me dirá que no tuve que hacer eso. Pero le explicaré que es por el arte y lo entenderá", afirmó la mujer.
Las iglesias evangélicas prohíben la participación en el carnaval. Es un consenso entre los pastores, que esta celebración anual va en contra de varias doctrinas del cristianismo, basadas en la Santa Biblia, ya que promueve prácticas y valores destructivos para la vida espiritual y física de los seres humanos.
Si bien es cierto que muchos grupos de cristianos acuden al carnaval, lo hacen con el objetivo de predicar el Evangelio, y no participan de esa celebración.
AcontecerCristiano.Net
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