Los pastores en China se han visto obligados a integrar las palabras del presidente Xi Jinping en un relato bíblico, mientras que el Partido Comunista Chino presiona cada vez más a los líderes de la Iglesia para que incluyan la ideología política en sus sermones.
Según la revista italiana Bitter Winter, el Partido Comunista siguió utilizando la pandemia del nuevo coronavirus para controlar y politizar las religiones.
En septiembre pasado, los dos Consejos Cristianos Chinos de Quanzhou, una ciudad a nivel de prefectura en el sureste de la provincia de Fujian, exigieron que todas las Iglesias de las Tres Autonomías integraran en sus sermones las ideas del presidente Xi sobre cómo reducir el desperdicio de alimentos, para que "la política llegue a todos en la sociedad".
Para implementar la orden, algunos pastores tuvieron que incluir las palabras del líder en la historia bíblica en la que Jesús multiplicó cinco panes y dos peces para alimentar a cinco mil personas.
En la primavera, los funcionarios también ordenaron al pastor de una iglesia en Shengzhou, una ciudad a nivel de condado en la provincia oriental de Zhejiang, que predicara a la congregación que "los estadounidenses trajeron COVID-19 a China".
Un pastor de otra iglesia en las Tres Autonomías en Shengzhou reveló que los funcionarios del gobierno supervisan cada vez más los sermones de los pastores. Esto hace que los líderes religiosos estén cada vez más ansiosos, dijo, ya que el Partido Comunista Chino ha amenazado con cerrar los lugares de culto que se niegan a cumplir con sus demandas.
"Así es como el gobierno siniza el cristianismo", comentó un pastor de Shengzhou.
En agosto, los dos consejos cristianos chinos de la provincia central de Henan emitieron el "Aviso sobre la organización y el lanzamiento de actividades de oración por la paz para conmemorar el 75 aniversario de la victoria de la guerra de resistencia del pueblo chino contra la agresión y la guerra japonesas antifascista mundial".
Los avisos requerían que las iglesias en Henan "organizaran actividades religiosas conmemorativas, den sermones temáticos, realicen seminarios, visiten monumentos de guerra y rindan homenaje a los mártires revolucionarios de China", según Bitter Winter.
"La Oficina de Asuntos Religiosos nos obligó a predicar al respecto y nos ordenó integrar aspectos de la cultura tradicional china y la Constitución en nuestros sermones", dijo un pastor. "Las iglesias que desobedecieron fueron amenazadas con el cierre y las congregaciones suprimidas".
El pastor también se vio obligado a promover las "conquistas" de Xi Jinping para poner fin a la pandemia antes de que pudiera reabrir su iglesia.
"El Partido Comunista de China espera difundir su propaganda con nuestra ayuda y probar si obedecemos al gobierno", dijo un clérigo de las Tres Autonomías de la provincia de Fujian. "Quieren controlar el cristianismo, porque crece más rápido en China".
AcontecerCristiano.Net
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